Sesión 2: Un aliado inesperado

Mientras descansan del banquete y discuten su nuevo curso de acción, en Ravenhold, reciben una inesperada visita. Un elfo llamado Theren, cuyo cuerpo es recorrido por horribles cicatrices que emanan un brillo azul les pide audiencia ofreciéndoles algo de información. Se reúnen con este personaje, el cual les cuenta que es un fugitivo ex-miembro de la Orden del Fuego Azul. Acaba de renegar de la orden, y les trae información sobre un inminente ataque de dicha orden, a la región que ellos ahora habitan. Con cierto recelo le hacen muchas preguntas, antes de ofrecerle comida y hospedaje, al menos por la noche.

Durante el tiempo que el elfo descansa, Dayereth, Baltasar y Snake consultan con los Harpers, sobre los eventos ocurridos recientemente. Los Harpers no tienen conocimiento de los actuales planes de la orden, y les encomiendan al grupo investigar estos hechos. Si logran encontrar pruebas contundentes sobre un posible ataque a la región, podrían brindarles algo de ayuda concreta. Pasa la noche sin inconvenientes, y en la mañana del día siguiente mantienen una nueva reunión con el elfo.

Luego de una extensa charla, deciden sumar esfuerzos contra la orden, ya que parece ser un enemigo común de ambos, aunque por diferentes motivos. Ya que Theren parece decidido a visitar a Lord Verminaard en Waterdeep, el grupo decide acompañarlo. La elfa, Isis, se une al grupo y los acompaña hasta Baldur's Gate.

Una vez en la ciudad, recaban información sobre Lord Verminaard, y siguen sus movimientos. Luego de algunos desencuentros, y ya cayendo la noche, logran encontrar indicios de que abandonó la ciudad con rumbo norte, acompañado por alguno de sus guardias. Deciden regresar a Ravenhold siguiendo ese camino, y durante el viaje se cruzan con una carreta a la cual le falta una rueda. Una persona que dice ser comerciante les pide ayuda para arreglarla. Al bajar de los caballos, Kalkennash logra distinguir a la distancia unas siluetas que parecen estar observando lo que ocurre, e inmediatamente da el grito de "emboscada". El comerciante toma un arma de la carreta y comienza un enfrentamiento.

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