Sesión 13: Asalto a Angolmar

Tarsakh 18, 1480 DR (Year of Deep Water Drifting).

Luego de unos días de viaje, llegamos al templo subterráneo de Corellon (que ya habíamos visitado apenas llegamos al feywild). Es en este templo que comienza el túnel que utilizaremos para infiltrarnos en la fortaleza fomorian de Angolmar. Luego de despedirnos de nuestros guías eladrin, emprendimos la marcha a través de la oscuridad de los túneles del feydark.

Pasadas unas cuantas horas de viaje, una amplia caverna con abundante vegetación subterránea rompe la monotonía de los túneles. Duncan se acerca a investigar, pero no logra ver varias esporas ocultas entre la vegetación. Cuando el drow se percata de lo ocurrido, ya estaba rodeado por media docena de esporas que lo atacan con alguna clase de veneno. Cuando el resto del grupo llega al lugar, se encuentran con el elfo corriendo por entre los hongos, intentando salvar su vida. Afortunadamente las esporas no representaron demasiados problemas para el grupo, pese a que unos segundos después, varios myconids se unieron al ataque. El combate no trajo demasiadas consecuencias para el resto del grupo, los cuales luego de derrotarlos, descansan algunos minutos para recobrar las fuerzas.

Luego de dejar la caverna atrás, continuamos el camino a través del túnel. Algunos minutos después, notamos que el túnel comienza a descender levemente, hasta llegar a cubrirse de agua completamente. Asumiendo estar cerca de nuestro destino, utilizamos las pociones que nos obsequiaron los señores de los mares. Inmediatamente desarrollamos branquias y membranas entre los dedos de nuestras extremidades, lo que nos permitió respirar bajo el agua y nadar a una velocidad increíble. Haciendo uso de estas habilidades, nos sumergimos en el túnel y nadamos hasta que finalmente desembocó en un extenso mar subterráneo.

Alejándonos a una distancia prudencial de la pared de roca, Duncan logra ver con su vista de drow, la fortaleza fomorian. Desde nuestra ubicación actual (en el agua), podemos acceder fácilmente a un pequeño puerto, y de ahí a la entrada trasera de la fortaleza, custodiada por un gigantesco fomorian. Esperamos un tiempo hasta que el ejército eladrin que supuestamente avanzaría hasta la puerta principal llegara. Cuando comenzamos a escuchar indicios de que se aproximaba una batalla, Duncan se coloca el anillo que lo transformó en un fomorian y se acercó a la puerta. Luego de una charla poco amistosa con el guardia, en donde quedaron en evidencia las pocas dotes del drow para la diplomacia, logró pasar al interior de la fortaleza, armado con los barriles explosivos para intentar volar la muralla. El resto del grupo decidió esconderse debajo de uno de los anchos muelles del puerto. Luego de varios minutos, el efecto de la poción para respirar debajo del agua se extinguió.

Mientras tanto, Duncan transformado en fomorian, se las arregló para escapar al escuadrón de guerra al que había sido asignado por un líder de los gigantes, y logró colocar los barriles explosivos en distintos puntos de la muralla principal. Improvisando una mecha, logró hacerlos detonar en rápida sucesión volando una buena parte de la muralla. En ese momento el caos se adueñó del interior de la fortaleza fomorian. Aprovechando esto, el resto del grupo decidimos intentar entrar en el castillo. Ya que la puerta estaba cerrada con llave, decidimos hacer salir al guardia utilizando una pequeña marioneta de Polka. El gigantesco fomorian al verla, le dispara un rayo de luz de sus manos haciéndola trizas. Cuando se acerca a investigar, intentamos sigilosamente pasar por detrás de él. Lamentablemente, Alexandria da un paso en falso haciendo algo de ruido, e inmediatamente el guardia detecta nuestra presencia y gira su cabeza hacia la deva.

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